En la tarde del 24 de julio, asistimos a una reunión convocada por Ferrovial para dar continuidad al encuentro que los Secretarios de los sindicatos ferroviarios mantuvieron la semana pasada con la Dirección del Grupo RENFE, en la búsqueda de soluciones dialogadas al conflicto.
En la misma, fue la propia RENFE la que puso sobre la mesa la opción de mantener las condiciones sociolaborales del convenio colectivo actual, dejando a un lado las “medidas de flexibilidad” de la empresa y centrando la negociación en el incremento salarial. Todas las organizaciones sindicales, excepto CGT, consideramos la posibilidad de explorar esa opción, siempre que los incrementos propuestos fueran los suficientes para que no suponga un retroceso en el poder adquisitivo del personal.
Con ese ánimo, desde UGT, junto con CCOO y SF, consensuamos una propuesta que mantiene las condiciones laborales de todos los colectivos, con incrementos salariales que garantizan el poder adquisitivo y, fundamentalmente, incluye una garantía de empleo sin que ello suponga un nuevo sacrificio para la plantilla.
Poco nos sorprendió la oposición a participar en la propuesta por parte de CGT, y menos después de manifestar rotundamente su negativa a alcanzar ningún tipo de acuerdo con la empresa, centrando su único objetivo en que Ferrovial pierda la opción de prorrogar el contrato.
No vamos a defender a una empresa que no ha sabido valorar a sus trabajadores/as, y que ha mantenido durante la negociación una actitud muy agresiva y perjudicial para los intereses de la platilla, conduciéndonos a la situación actual. Sin embargo, no entendemos ni compartimos la postura partidista de una organización que antepone sus intereses propagandísticos a los intereses de esa plantilla a la que dicen defender, dinamitando cualquier vía de negociación a la espera de que el resto de organizaciones resolvamos el problema sin más preocupación ni ocupación que posicionarse en contra, aprovechando para buscar culpables de romper la unidad sindical. Les recordamos que la unidad es consenso, no imposición, pero por desgracia esa postura es a la que nos tienen acostumbrados.
Desde UGT entendemos que el fin de una organización sindical es estar al servicio de los trabajadores/as y velar por sus intereses. Por ello, creemos que no es una opción válida asistir a una reunión predispuestos a no presentar propuesta alguna, más allá de convocar nuevas movilizaciones que generen más quebranto económico a la plantilla, y con el único objetivo de obtener rentabilidad sindical.
No obstante, ahora es la empresa la que tiene en su mano acabar con el conflicto, para lo cual se ha convocado una reunión mañana miércoles con el fin de recibir la contestación de Ferrovial a la propuesta, y esclarecer así si existe la opción de trasladar una solución para su aprobación por la mayoría de la plantilla, o por el contrario optan por mantener el conflicto abierto.